La acupuntura es una técnica de medicina tradicional que se utiliza, por ejemplo, para eliminar el cansancio y el dolor y devolver el bienestar al paciente. Su origen se sitúa en China y consiste en la inserción y la manipulación de agujas en puntos claves del cuerpo llamados acupuntos.
La acupuntura ha pasado de ser una terapia alternativa exclusiva en humanos a aplicarse en los animales para ayudar en el tratamiento para la curación de nuestra mascota.
Se puede utilizar por ejemplo para tratar problemas gastrointestinales, respiratorios, renales, hepáticos, dermatológicos, musculoesqueléticos, mejorar la recuperación tras una cirugía, aliviar los dolores de huesos que padecen cuando son mayores… en definitiva, para conseguir darles una mejor calidad de vida cuando no se encuentran bien y/o una prevención para evitar recaidas.
Es aquí, en este punto, donde es muy recomendable acudir a la Acupuntura y Medicina Tradicional China.
Preguntas más frecuentes que surgen al comenzar con el Tratamiento de acupuntura:
El número de sesiones varía dependiendo de la enfermedad y del estado de salud del animal, y lo que es más importante, también depende del tiempo que lleve nuestro perro con dicha enfermedad; es decir, un perro fuerte de mediana edad con principio de artrosis en cualquiera de sus articulaciones responderá rápido a la acupuntura, con 2 o 3 sesiones se empiezan a ver mejorías en su condición, vemos que deja de cojear o que está más fuerte de sus extremidades posteriores y sube las escaleras sin problemas.
Sin embargo, un perro de avanzada edad con el mismo problema de artrosis, pero desde hace mucho más tiempo, necesitaría más sesiones de Acupuntura para estabilizarlo. En ambos casos también nos ayudaremos de Fitoterapia y/u Homeopatía para conseguir aliviar el dolor lo antes posible.
Las sesiones de mantenimiento se irán alejando unas de otras conforme veamos que el perro esta estable y no muestra síntomas.
En el caso de enfermedades agudas, como por ejemplo un resfriado o una diarrea, tan solo necesitaremos de 1 a 3 sesiones para resolver por completo el problema; sin embargo, en casos de enfermedad crónica como bronconeumonías crónicas, IBD (enfermedad inflamatoria intestinal), alergias, cáncer o inmunodeficiencias se necesitarán un mayor número de sesiones para estabilizar al paciente. Y ciertamente lo recomendable es que estos pacientes crónicos tengan sesiones de acupuntura de mantenimiento con el único fin de mejorar su calidad de vida.
La acupuntura trabaja a nivel local, regional y sistémico, mediante una gran variedad de mecanismos fisiológicos. Ejerce sus acciones a través del Sistema Nervioso, Sistema Hormonal, Sistema Vascular, Sistema Linfático, Sistema Inmunológico… Produciendo efectos inmunomoduladores, antiinflamatorios, regenerativos, regulación de la percepción del dolor a nivel neuronal (interneuronas inhibitorias) y mediante neurotransmisores como las endorfinas, regulacíon de la microcirculación, de la homeostasis, etc.
La acupuntura no duele en absoluto, de hecho, la mayoría de los perros y gatos se duermen durante las sesiones.
Sí es verdad, que al pinchar sobre un acupunto existe una reacción de sorpresa por parte del paciente, y dependiendo de cómo sea su carácter se puede sorprender, pero no es dolor lo que sienten.
En algunos casos, dependiendo del tamaño del animal y la lolalizacíon del punto a tratar, se puede optar por el uso del láser y realizar laserpuntura.
El primer uso que viene a la mente es su uso como tratamiento para el dolor, ya sea crónico o agudo. Esta aplicación sería habitual en casos de cojeras por traumatismos, artoris, displasia, esguinces, contracturas, postoperatorios, rehabilitación, etc.
Sin embargo los beneficios de la acupuntura van más allá de su uso como analgésico, ya que también es muy útil en casos de asma, bronquitis, alergias, dermatitis, prurito, alopecias, diarrea, estreñimiento, vómitos, epilepsia, ataxia, paresias, parálisis, debilidad, cansancio, hernias de disco, discoespondilitis, artrosis, displasia, heridas que no cierran, insuficiencia hepática, renal, incontinencia, cáncer, enfermedades inmunomediadas, etc…
En ambas circunstancias la acupuntura proporciona un efecto analgésico y de bienestar. Además mejora la recuperación de tejidos favoreciendo la regeneración y ayudando a la no progresión de la enfermedad.
La primera sesión de acupuntura suele durar una hora y media, en ella se hace un exhaustivo examen al paciente y un cuestionario a los propietarios con el objetivo de conocer en profundidad el problema y hallar un diagnóstico. Valoración del paciente y exploración física.
En esta misma sesión comenzamos con la Acupuntura y si es necesario aplicamos Fitoterapia y asesoramos en temas de suplementos. Las siguientes sesiones son más ligeras, de 1 hora aproximadamente en el que nos contaréis los cambios que habéis podido apreciar, reevaluamos al perro y continuamos con la acupuntura.
Cada perro o gato es un mundo, todos son diferentes y por tanto todos responden de manera diferente frente a la acupuntura, pero por lo general… ¡¡les suele gustar!!
Alba Sánchez
Licenciada Veterinaria por la UCM y experta en acupuntura y en medicina tradicional china.